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Definición de un derivado financiero

Un derivado financiero se define como un instrumento de inversión cuyo precio depende (o se deriva) de un activo subyacente. Tal activo subyacente puede pertenecer a alguna de las siguientes categorías de instrumentos de inversión “tradicionales” o “básicos”:

Capital y participación a través de, por ejemplo, acciones.
Renta fija a través de, por ejemplo, bonos.
Divisas
Mercancías como oro y petróleo.

Los derivados financieros surgen como un contrato entre dos partes. Una parte compra (de quien se dice que ha entrado en una posición larga) y otra parte vende (de quien se dice que ha entrado en una posición corta). El contato define las condiciones, ya que cada una de las partes accede a realizar una acción financiera que afecta a la otra ya sea en el presente o en el futuro, y debe incluir todos los derechos y obligaciones de ambas partes.

Estos instrumentos tienen una característica similar a los seguros en el sentido de que permiten transferir riesgo de un ente a otro. Esto no implica un cambio en el riesgo intrínsico del rendimiento o retornos del instrumento de inversión, sino una transferencia de este riesgo a otro participante del mercado financiero. La fuente de riesgo en el caso de estos instrumentos es justamente aquello de lo que derivan su valor: el activo subyacente.

Existen tres categorías principales de derivados financieros:

Compromisos a futuro: Permiten fijar el precio en el que se va a vender o comprar el activo subyacente en algún momento del futuro. Los compromisos a fururo incluyen contratos forward, contratos futuros y swaps.
Reclamos contingentes: Permiten fijar el precio en el que se podrían vender o comprar el activo subyacente. Observe que en este caso no se genera una obligación, sino una opción, y de ahí el nombre de un ejemplo de este tipo de derivados.
Híbridos: Consiste en una combinación de los dos tipos expuestos anteriormente.

Ventajas de los derivados financieros

Puede surgir la pregunta de por qué es necesario crear instrumentos de inversión que dependan de otros cuando los principales ya existen en primer lugar. Los derivados financieros cuentan con las siguientes ventajas como método de inversión:

Son inversiones generalmente más líquidas que sus contrapartes subyacentes.
Permiten mayor apalamcamiento. Esto quiere decir que participar en inversiones de derivados requiere menos capital de parte del inversionista relativo al valor de los activos subyacentes. Este apalancamiento puede ser un arama de doble filo, ya que movimientos relativamente pequeños en el desempeño del activo subyacente puede generar ganancias y pérdidas significativas en los mercados de sus respectivos derivados.
Generalmente cuentan con menores costos de transacción.
Presenta la posibilidad de generar estrategias de manejo de riesgo más eficientes.

Mercados de derivados

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Tipos de derivados financieros

Compromisos a futuro

Contratos forward

Consiste en una obligación entre dos partes en la que el comprador accede a comprar el activo subyacente al vendedor en una fecha futura a un precio fijado en el momento de firmar el contrato.

Suponga que se realiza un contrato forward en el tiempo \(t = 0\) y que este vencerá en el tiempo \(t = T\). Se define \(F_0(T)\) el precio al que se debe realizar la compra y venta del activo subyacente según el contrato. En \(t = T\), el activo subyacente tendrá un precio real (o precio spot) de \(S_T\). Así, para el vendedor del activo la ``ganancia’’ será de \(F_0(T) - S_T\), ya que recibió \(F_0(T)\) por un bien cuyo valor es \(S_T\). Por otra parte, la del comprador será de \(S_T - F_0(T)\), ya que está recibiendo un bien valorado en \(S_T\) por el que pagó \(F_0(T)\).

Lo anterior indica que, si se desea tomar una posición larga en un contrato forward, se desea que el precio del activo subyacente aumente y sea mayor que el precio spot en el momento de expiración. De esta forma se tendría una “ganancia” positiva. Sucede lo opuesto en el caso de la posición corta.

Es importante notar que no todos los contratos forward deben cumplirse haciendo la entrega del activo subyacente como tal, sino que pueden saldar de forma monetaria. En estos casos, el vendedor simplemente realiza el pago de \(S_T - F_0(T)\) al comprador en el momento de expiración del contrato. Así, si el comprador desea adquirir el activo subyacente, puede hacerlo en el mercado, pagando \(S_0(T) - [S_T - F_0(T)] = F_0(T)\), que equivale al precio estipulado originalmente en el contrato. Estos tipos de contratos forward se conocen como non-deliberable forwards (NDFs), ash-settled o contratos por diferencias.

Futuros

Son una forma especializada de contratos forward. Son más estandárizados que los contratos forward en el sentido que se transasn en una bolsa de futuros que cuenta con regulaciones más definidas y estrictas. Su principal dierencia con los contratos forward consiste en el asentamiento de ganancias y pérdias al final de cada día. Esto consiste en un ajuste según la fluctuación del precio del futuro transado con el paso de cada día (el precio fluctúa con el tiempo según se obtiene nueva información de los mercados).

Suponga que se realiza un contrato futuro entre un vendedor y un comprador, en el que se define un precio futuro \(p\). Durante el día, más de estos contratos van a ser realizados, con precios distintos de \(p\) por el motivo explicado anteriormente. Al cierre de la bolsa, se calcula un promedio de todos los precios diarios, y este se define como el ajuste diario \(p_a\) (este proceso también se llama mark-to-market).

Cada parte del contrato (el comprador y el vendedor) tienen una cuenta a la que deben depositar un monto inicial (usualmente menos de \(10\%\) del precio del futuro) llamada cunta de margen. Al monto inicial se le llama margen inicial. A esta cuenta se le depositan o cargan las ganancias o pérdidas generadas por el proceso de mark-to-market. Así, si \(p_a > p\), entonces esta es una situación que beneficia al comprador del contrato, por lo que la diferencia \(p_a - p\) será transferida de la cuenta de margen del vendedor a la del comprador. Sucede lo contrario si \(p_a < p\).

La cuenta de margen cuenta con otra característica llamada el margen de mantenimiento. Esta consiste en el valor mínimo que debe tener en todo momento cada parte del contrato futuro en su cuenta de margen. Si en algún momento, debido al proceso de marking-to-market la cuenta de alguna de las partes cae por debajo de este límite, se realiza lo que se denomina un llamado de margen o margin call. En ese caso, la parte cuya cuenta haya caído por debajo del límite deberá “rellenarla” hasta cumplir no con el margen de mantenimiento, sino con nuevamente el margen inicial.

Swaps

En un contrato swap, dos partes acceden a inercambiar flujos de dinero. Uno de estos flujos debe ser variable y estar sujeto a algún activo subyacente, mientras que el otro puede ser variable (sujeto a otro activo subyacente) o fijo.

Los swaps más comunes son aquellos que intercambian flujos de dinero con interés fluctuante por un flujo con interés fijo.

Reclamos contingentes

Opciones

Una opción es un derivado en el que el comprador paga una suma de dinero al vendedor para adquirir el derecho de vender o comprar un activo subyacente a un precio específicado. Esta potencial compra o venta del activo puede darse, seguún las condiciones del contrato, en el momento del vencimiento del mismo o antes de que esto suceda. El precio fijado en el contrato se denomina precio de ejercicio o precio strike.

Si una opción brinda el derecho de comprar el activo subyacente, a esta opción se le llama call u opción call. Si una opción brinda el derecho de vender el activo subyacente, a esta opción se le llama put u opción put. A las opciones que pueden redimirse antes de la fecha de caducidad se les llama de estilo americano, mientras que a aquellas que solo pueden ejercitar el derecho en el tiempo de vencimiento se les llama de estilo europeo.

Derivados de crédito

El riesgo crediticio surge de la acción de prestar dinero u otros activos a otras entidades y la posibilidad de que estas no logren hacer frente a las obligaciones que surgen de este préstamo. El surgimiento de los swaps y las fuertes regulaciones de la industria de seguros causó el surgimiento de derivados financieros orientados específicamente al manejo de riesgo crediticio. Observe que los compradores de los derivados de crédito son las entidades que emiten crédito, y por lo tanto están expuestas a este riesgo. En estos, un comprador adquiere de un vendedor la protección contra algún tipo específico de potencial pérdida crediticia. Los principales tipos de derivados de crédito son:

Swap de retorno total: Usualmente se utilizan con bonos o préstamos. En este caso, el comprador de protección ofrece dar al vendedor de protección todos los retornos asociados al crédito en cuestión, a cambio de un flujo de dinero con una tasa de interés que puede ser fija o variable. El retorno total incluye intereses, principal y ganancias de capital. Así, si la entidad obligada a hacer los pagos del bono/préstamo cesa de hacerlo, la entidad que emitió el crédito seguirá recibiendo el flujo de dinero del vendedor de proteección.
Opción de margen de crédito: Consiste en una opción cuyo activo subyacente es la diferencia entre el rendimiento de un bono cualquiera y un bono referencia que se considera ``libre de riesgo’’.
Nota vinculada al crédito
Swap de incumplimiento crediticio (CDS): Son el derivado crediticio más utilizado. Su dinámica consiste en que el comprador de protección crediticia hace pagos periódicos al vendedor de protección hasta que sucede un evento crediticio, momento en el que este debe hacer una compensación correspondiente. Un evento crediticio puede consistir de una o múltiples condiciones, desde el incumplimiento de pagos hasta una reestructuración de las condiciones del crédito, y deben estar estipuladas en el contrato del derivado. Conceptualmente, son similares a un seguro, pero los CDS carecen de ciertas restricciones y condiciones que los hace más flexibles y atractivos en ciertas situaciones.

Introducción a derivados financieros